¿Qué debes tener en cuenta a la hora de hacer una reforma?

Si quieres hacer una reforma de tu vivienda y renovar por completo el aspecto de la misma, hay una serie de cosas que debes tener en cuenta. Es importante que tengas paciencia y desde el primer momento te conciencies de que la obra no va a estar acabada en dos días. Aunque lo hayas planificado todo al detalle, lo más habitual es que aparezcan algunos imprevistos durante la reforma, sobre todo si se trata de un inmueble antiguo.

Todo lo que debes tener en cuenta para hacer una reforma

En primer lugar, tienes que pensar en tus necesidades, tanto presentes como futuras. Para ello, coge papel y bolígrafo y anota todo lo que consideres importante. Tómate el tiempo que necesites para ello, ya que tener claras las necesidades es clave para que el resultado sea exactamente el que tú quieres.

Una vez sepas todo lo que necesitas, el siguiente paso es hacer un dibujo a mano alzada de cómo quieres que sea la distribución de la vivienda. De esta manera, cuando acudas a la empresa de reformas, te resultará mucho más sencillo explicar qué es lo que estás buscando.

Existen diferentes maneras de ponerse en contacto con los profesionales en los que quieres confiar para realizar la reforma de tu casa. Debes informarte sobre los servicios que ofrecen y revisar algunos de sus trabajos para saber si van a ser capaces de cumplir tus expectativas.

Tienes que comparar diferentes presupuestos, analizando toda la documentación y la calidad de los materiales que ofrecen. Una vez decidas la empresa de reformas que quieres que se ocupe de la obra, el contrato de obra es la mejor forma de garantizar el desarrollo de la misma. Es esencial que la compañía en cuestión tenga un seguro de Responsabilidad Civil, ya que durante la obra pueden surgir inconvenientes o averías que puedan causar daños a los vecinos, como la rotura de una tubería.

La gran mayoría de reformas requieren de una serie de permisos. Si confías en una buena empresa, esta se encargará de su tramitación, lo cual es un gran punto a favor. También es de especial interés consultar los estatutos de la comunidad de vecinos.

La Ley de Propiedad Horizontal determina que “cualquier propietario puede hacer reformas siempre que no altere la seguridad del edificio, su configuración o su estructura general o sus elementos exteriores, y siempre que no perjudique a algún otro propietario”. Por lo tanto, los estatutos de la comunidad en ningún caso pueden prohibir hacer reformas, siempre y cuando se respete lo que determina la normativa en vigor.

Y, por último, recuerda la importancia de decir si algo no te gusta. Aunque suponga un aumento del presupuesto, es preferible que lo digas en ese momento, a tener que arrepentirte de ello toda la vida.

Errores que no debes cometer

En una reforma integral, debes pensar en tus necesidades frutas, pero sin olvidar las actuales. Es mucho más importante pensar en la practicidad del momento actual. Las formas, los colores, los materiales, los acabados y la distribución son fundamentales para el bienestar del día a día, así que hay que desarrollar la vivienda en base a una línea estética.

Uno de los errores más comunes es el de dejarse llevar por las modas actuales y pasajeras en el mundo de la decoración. Es cierto que puedes combinar tus gustos personales y tu estilo de vida con las últimas novedades, pero sin que la línea estética marcada por las tendencias sea determinante en la decisión. El objetivo es crear espacios llenos de personalidad y con unas líneas atemporales que sean duraderas en el tiempo.