Errores comunes a la hora de reformar una vivienda

Puede que, a veces, al embaucarnos en una nueva reforma de la casa sintamos que no estamos preparados o que vamos a dejar cabos sueltos que luego se convertirán en problemas futuros. No obstante, si desde el principio, te organizas correctamente, lo más seguro es que la obra vaya como la seda.

Para animar a aquellos que están pensando en reformar su vivienda, os dejamos este post en el que encontraréis los errores más frecuentes que se cometen antes, durante y después de una reforma. ¿Estáis preparados? ¡Empezamos!

Antes de la reforma

Lo primero es el presupuesto

Asegúrate de cuál es tu presupuesto y cíñete a él todo lo que puedas. Además, es conveniente que dejes un poco de dinero apartado para aquellos imprevistos que puedan generarse. Por ello, desde GCE te recomendamos que hagas una lista con todo lo que necesitarás y cuánto dinero puedes destinar a cada tarea: desde las más grandes a aquello más insignificante como el cambio de bombillas.

Permisos de obra

¿Sabes si lo que vas a hacer es una obra menor? ¿Mayor? ¿Qué documentación necesitas? ¿Es un cambio de uso? Dependiendo de la reforma que hagas necesitarás unos permisos, unos requisitos y un proceso burocrático distinto. Por ello, piensa bien cuál es el tipo de reforma que vas a hacer e investiga qué documentación necesitas.

¿Estética o funcionalidad?

Muchas veces, las personas primamos en las reformas la estética a la funcionalidad y este es, sin duda, un grave error. Una casa es donde vives, donde pasas gran parte de tu tiempo y donde debes sentirlo como tu hogar. Por ello, es importante que te sientas cómodo en ella. Te recomendamos que priorices en qué es lo que necesitas y, a partir de resolver la parte funcional, te centres en el lado estético de la vivienda. Por ejemplo, por mucho que queramos una bañera gigante, si el piso es pequeño, puede que no te convenga sacrificar una habitación por ello.

Además, sabemos que Pinterest es genial y nos va a ayudar a visualizar cómo es la casa que queremos conseguir. Pero antes de nada… ¡Piensa! ¿Todas esas fotos que has guardado en tu tablón quedan bien al juntarlas? Y lo más importante: ¿esas ideas se ajustan a tu presupuesto? Si la respuesta es sí, ¡maravilloso! Si es que no, que sirva solo como inspiración.

Distribución, diseño y materiales

Desde un primer momento debemos tener clara la distribución que vamos a querer en la vivienda, cómo va a ser el diseño y qué materiales queremos (y podemos) utilizar. Por ello, antes de empezar a picar y construir, pensad en qué es lo que se necesita y cómo lo podemos conseguir.

Durante la reforma

Los plazos de entrega

Puede que este sea el punto que, durante una reforma, más puede impacientar al propietario. Nuestro consejo es que no corráis: dedicar tiempo a pensar en el proyecto y definirlo al detalle es fundamental. Así, el ritmo de la obra será mucho más rápido. Por otra parte, recuerda que en la mayoría de las reformas pueden surgir inconvenientes y aspectos con los que no habíamos contado. En este caso, los plazos pueden demorarse y es importante no perder la paciencia y no desesperarse.

Ideas… ¿fijas o difusas?

Por una parte, puede que llevemos unas ideas muy fijas y no nos dejemos aconsejar por los profesionales. Este es un grave error puesto que, cuanto más confíes en la empresa, arquitecto, etc. mucho más llevadero será. Esta claro que tu visión es lo que prima, pero puede que la persona o empresa encargada de materializar tus ideas observe algún error que no hayamos visto antes. Así que, al menos, escucha lo que tiene que contarte.

Por otra parte, puede ocurrir todo lo contrario y es que nuestras ideas no estén claras. En este caso, las personas suelen recurrir al consejo de muchos amigos, familiares, etc. y a veces no es la mejor idea. Por ejemplo, imagina que te preguntan si quieres que todas las habitaciones cuenten con un armario empotrado. Al no tenerlo claro, preguntas y muchas personas te aconsejan que lo mejor es que no. El problema es que esas personas no conocen el resto de la obra, ni su distribución, por lo que su consejo (con muy buena intención) no suele ajustarse a la realidad o tus necesidades.

Facturas y tickets

Está claro que una reforma en casa puede inquietar a algunas personas y hacer que estén atentas a muchas cosas puede sobrepasarles. Por ello, hay veces que nos olvidamos de ciertos aspectos. En este caso, es el de guardar todas las facturas y recibos que vamos acumulando. Es muy importante que se guarde todo para poder llevar un control real de la reforma y del presupuesto.

Después de la reforma

Eficiencia energética

Tras darle un lavado de cara a la vivienda, de nada sirve si no hacemos la vivienda más eficiente. Por ejemplo, cambia todos los electrodomésticos por aquellos que tengan una categoría A+, cambia el tipo de calefacción de tu vivienda por una más eficiente y utiliza bombillas de bajo consumo, etc. Son muchas las opciones para crear un hogar ecofriendly.

Muebles y limpieza

Un error muy común es comprar los muebles nuevos durante la reforma. Es probable que algunas cosas cambien y luego no tengas espacio para los muebles. Espérate a tener la vivienda perfecta para decidir sobre los muebles.

Además, una vez los recibas y ya la reforma haya terminado, ¡espera! No los coloques hasta que no hayas limpiado la vivienda perfectamente. Las reformas generar un poco de suciedad y si colocamos los muebles antes de limpiar puede que se estropeen o se ensucien.

Estos son algunos de los consejos que os dejamos desde GCE para que vuestra reforma sea lo más llevadera posible. Os aconsejamos que dejéis vuestra vivienda en manos de profesionales que os ayuden en todo el proceso y en no cometer estos errores tan comunes en cualquier reforma.